Intensa Semana Santa en el Seminario

Una intensa Semana Santa se vivió en el Seminario Pontificio Mayor de Santiago. Las actividades académicas se suspendieron para el Jueves Santo y los seminaristas, junto con los formadores, acudieron a la antigua iglesia de las Agustinas, donde se realizó el tradicional encuentro del clero de Santiago con su Arzobispo. Posteriormente, todos se trasladaron a la catedral, donde se celebró la Misa Crismal. En la ocasión, los más de 200 sacerdotes presentes —encabezados por monseñor Ricardo Ezzati— renovaron sus promesas sacerdotales. También se consagraron los óleos que se utilizarán durante todo el año para los sacramentos de iniciación cristiana. A la Misa también asistieron varios obispos, así como el Nuncio Apostólico de Su Santidad. En la tarde, el Arzobispo, acompañado por los seminaristas y formadores, presidió la Misa in Cena Domini, recordando la Última Cena del Señor y lavando los pies de 12 ancianos del Hogar de las Hermanitas de los Pobres.   

            El Viernes Santo, luego de un retiro predicado durante la mañana, los seminaristas volvieron a la catedral para acompañar a monseñor Ezzati en la celebración litúrgica de la Pasión del Señor. Durante la tarde, se realizó el tradicional Via Crucis en las inmediaciones del Seminario.

            El Sábado Santo se volvió a predicar un retiro para los seminaristas y en la noche todos se trasladaron a la catedral para participar de la Vigilia Pascual, a la espera de la Resurrección del Señor. Ante un repleto templo, el Seminario colaboró con la liturgia y celebró el triunfo de Cristo sobre la muerte con un espléndido coro. Posteriormente, para compartir fraternalmente el gozo de la resurrección, los seminaristas participaron de una animada y generosa cena.

            Finalmente, para culminar las celebraciones de Semana Santa, el Seminario concurrió nuevamente a la catedral para colaborar al Arzobispo en la Misa de Resurrección.